Blue Lagoon de Islandia: por qué nos encantó
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Disfrutamos de nuestra visita al spa geotérmico Blue Lagoon, en Islandia, con el aire fresco de septiembre. En el artículo nos sumergimos en nuestras experiencias personales: los baños en las piscinas geotérmicas del spa, la belleza del entorno y el ambiente general que desprende Blue Lagoon. Compartiremos los mejores momentos y recuerdos de nuestro viaje, junto con consejos prácticos e ideas útiles para ayudar a futuros viajeros a planificar una visita sin contratiempos. Lee nuestro artículo completo sobre Blue Lagoon.
Contenido del artículo
Blue Lagoon en Islandia
Blue Lagoon es uno de los balnearios geotérmicos artificiales más famosos del mundo. También se considera el baño mineral artificial más grande del planeta. Al ser una de las atracciones más conocidas de Islandia, Blue Lagoon es una visita imprescindible para los viajeros. Durante nuestro viaje de otoño a Islandia, tuvimos la oportunidad de hacer una excursión a Blue Lagoon y disfrutar de sus aguas termales antes de volar de regreso a Helsinki.
En este artículo contamos los datos básicos sobre Blue Lagoon, una de las 25 maravillas del mundo. También compartimos nuestra experiencia personal, con fotos y un vídeo de la excursión, para darte una mejor idea de cómo es Blue Lagoon. Te ofrecemos algunos consejos basados en nuestra visita: cuándo ir, qué esperar y cómo aprovechar al máximo tu tiempo en Blue Lagoon.
¿Por qué visitar Blue Lagoon?
Este spa geotérmico ofrece una experiencia única a los viajeros en Islandia gracias a sus aguas cálidas de color azul lechoso. En particular, Blue Lagoon es un respiro perfecto para los pasajeros en escala en el Aeropuerto Internacional de Keflavík. La proximidad de Blue Lagoon al aeropuerto y su entorno singular son solo dos de los muchos motivos para no perdérselo.
Ubicación de Blue Lagoon
Blue Lagoon se encuentra al suroeste de Islandia, dentro de la península de Reykjanes, declarada por la UNESCO. Está a menos de 30 minutos en coche (aproximadamente 20 km) del principal aeropuerto del país, el Aeropuerto Internacional de Keflavík. Su ubicación ofrece un acceso fácil, por lo que es una parada ideal justo después de aterrizar o el lugar perfecto para relajarse antes de la salida del vuelo, como hicimos nosotros. El spa también está cómodamente cerca de la capital, Reikiavik (aproximadamente 50 km), por lo que encaja muy bien en un itinerario por la ciudad.
¿Cómo llegar a Blue Lagoon?
Para llegar al encantador Blue Lagoon en Islandia, hay dos opciones de transporte muy cómodas. Ir a Blue Lagoon es pan comido, ya sea en coche o en autobús. Si vienes desde Reikiavik o desde el aeropuerto de Keflavík, puedes reservar fácilmente entradas con traslado a Blue Lagoon. El trayecto dura aproximadamente 20 minutos desde el aeropuerto de Keflavík y 50 minutos desde el Aeropuerto Internacional de Reikiavik. Otra opción es conducir hasta Blue Lagoon por la carretera principal que conecta Keflavík y Reikiavik. Recomendamos alquilar un coche por comodidad, ya que el transporte público en Islandia, en general, es escaso.
Aparcamiento
Si llegas a Blue Lagoon en un vehículo de alquiler, como hicimos nosotros, podría preocuparte la disponibilidad de plazas. Por suerte, Blue Lagoon dispone de una amplia zona de aparcamiento gratuito, por lo que es fácil encontrar sitio. Las plazas son espaciosas, así que no necesitarás habilidades extraordinarias para aparcar. Como comentamos, no hay tarifa de aparcamiento, a diferencia de otros lugares turísticos de Islandia.
Cuándo ir
Blue Lagoon abre todo el año, y cualquier estación u hora del día es adecuada para visitarlo. Sin embargo, si pudiéramos elegir, recomendaríamos ir tarde, por la noche, en invierno. La combinación de aguas humeantes, el aire frío de la noche y la posibilidad de ver bailar las auroras boreales en el cielo crearía una experiencia realmente mágica.
Nosotros fuimos de día en septiembre, que no es la mejor temporada. Aun así, Blue Lagoon fue un espectáculo impresionante. El agua azul lechosa, rodeada de paisajes volcánicos agrestes, creaba un ambiente surrealista que nos cautivó al instante.
Nuestra experiencia en Blue Lagoon
Como despedida de los paisajes de Islandia, decidimos pasar el tiempo que nos quedaba de vacaciones en Blue Lagoon antes de nuestro vuelo de regreso a Helsinki operado por Finnair. Antes de esta visita, habíamos oído que Blue Lagoon ofrece un retiro sereno y que es la forma perfecta de cerrar una aventura islandesa. Así que reservamos cuatro horas extra en el trayecto desde el hotel hasta el aeropuerto de Keflavík. Nuestro vuelo salía a última hora de la tarde, lo que hacía perfecto encajar la visita a Blue Lagoon antes de embarcar.
¿Cuánto cuesta la entrada?
Optamos por la entrada Comfort de Blue Lagoon, que costaba 89 euros y resultó ser una excelente elección. Aunque no es barata, nos pareció razonable por la experiencia en conjunto. La entrada Comfort incluía el acceso a Blue Lagoon, una mascarilla de barro de sílice en el bar de mascarillas, una bebida de cortesía en el bar acuático y el uso de toallas. Aunque la entrada Premium costaba 20 euros más, sus ventajas adicionales incluían, entre otros, un albornoz, dos mascarillas de barro extra y una copa de vino espumoso gratuita al comprar una comida en el restaurante de Blue Lagoon. No elegimos la Premium porque pensábamos comer en la Icelandair Saga Lounge antes de salir. Blue Lagoon también ofrece una opción más exclusiva, el Retreat Spa, que incluye tratamientos.
Blue Lagoon utiliza precios dinámicos de forma similar a las aerolíneas.
Llegada
Llegar a Blue Lagoon fue muy sencillo. Encontramos fácilmente el aparcamiento con Google Maps y nos llamó enseguida la atención el vapor que salía de lo que parecía ser una planta industrial. Al acercarnos, vimos las preciosas pozas turquesa.
Aparcar fue sin complicaciones y solo tardamos unos 5 minutos en caminar desde la zona de estacionamiento hasta el edificio principal.
El registro en el spa fue cómodo: se podía hacer de forma manual o mediante el servicio de check-in en línea con el móvil. Elegimos esta última. La web de registro ofrecía instrucciones claras sobre las normas del spa y en seguida estuvimos listos para entrar. Aun así, pasamos por recepción, donde una persona amable comprobó nuestras entradas, nos entregó las pulseras y nos repitió las instrucciones esenciales. En conjunto, el proceso de entrada fue eficaz y quedamos bien informados sobre los servicios del spa.
Tu pulsera funciona como acceso, llave de taquilla y tarjeta de crédito dentro de Blue Lagoon. La cuenta se abona a la salida.
Antes de entrar a la piscina
En recepción nos recordaron con amabilidad que es importante ducharse antes de entrar en las piscinas. Nada más escanear la pulsera-llave en el torno, otra persona sonriendo nos entregó las toallas y nos indicó el vestuario. Al llegar al vestuario de la planta superior, vimos a muchos clientes, pero fue fácil encontrar una taquilla libre. Las zonas de duchas y vestuarios estaban divididas en secciones. La pulsera también servía como llave de las taquillas. Las taquillas funcionaban bien.
Todos los huéspedes deben ducharse completamente antes de entrar en la piscina geotérmica. Se proporcionan champú, acondicionador y gel de ducha. Hay una zona de duchas general y varias duchas privadas con paredes de cristal. Está prohibido hacer fotos en los vestuarios. Después de ducharnos, bajamos las escaleras que conducen a la piscina. Por favor, deja las toallas usadas en el carro de lavandería situado abajo. Otra persona del personal, junto a la puerta de entrada, entregaba toallas limpias a quienes salían de las piscinas rumbo a las duchas.
Entrada a la piscina
Para organizar el flujo, la puerta de entrada era distinta de la de salida. Metimos los pies en el agua azul lechosa del spa y notamos que el fondo resbalaba bastante. El punto de acceso es una pequeña rampa con pasamanos. Detrás de nosotros venían visitantes de mayor edad y vimos que uno de ellos resbaló al dar apenas unos pasos en el agua. Por suerte no se hizo daño. No recordamos señales o advertencias de que pudiera resbalar. Al atravesar finalmente la puerta acristalada hacia la piscina, vimos de inmediato lo grande que es este spa geotérmico y cuántas zonas distintas hay para disfrutar. La primera era una especie de cueva, donde los visitantes podían sentarse dentro y relajarse en el agua caliente.
Aguas termales
Las aguas termales de Blue Lagoon se forman por el calor del interior de la Tierra, que funde la roca en magma; este asciende por la corteza y calienta el agua subterránea, creando los manantiales. Blue Lagoon es singular porque sus aguas son ricas en algas, minerales y sílice. Todos estos elementos de Blue Lagoon son conocidos por sus propiedades nutritivas y reparadoras. La central geotérmica cercana también contribuye a la composición del agua, ya que es un subproducto de su operación.
A diferencia de otro famoso balneario de Reikiavik, llamado Sky Lagoon, el agua de Blue Lagoon no se calienta artificialmente, sino que procede de fuentes geotérmicas. El agua de Blue Lagoon combina agua de mar y dulce, con aproximadamente un 70% de agua de mar y el 30% restante de agua dulce. Nace de un acuífero geotérmico marino a 2.000 metros de profundidad. Su alto contenido en sílice le da una textura sedosa y un aspecto azul lechoso que invita al baño.
Muchos visitantes describen el agua de Blue Lagoon como increíblemente relajante y rejuvenecedora, por lo que es un destino imprescindible para quien busque una experiencia de spa de lujo. La composición mineral del agua hace que se sienta suave y sedosa en la piel, y su salinidad facilita flotar. El paisaje que la rodea, con impactantes campos de lava y una costa agreste, añade un toque de otro mundo, convirtiendo a Blue Lagoon en un lugar verdaderamente inolvidable.
Lo pasamos en grande en las piscinas y disfrutamos mucho de un agua suave y preciosa, a una temperatura perfecta (media de 38°C / 100°F). La poca profundidad de las piscinas nos permitió caminar o nadar con comodidad. Aunque a las 11 de la mañana había bastante gente, sentimos que todos tenían espacio y tranquilidad. Además, nos gustó encontrar una zona señalizada como silenciosa y sin móviles, donde estaba prohibido hacer fotos. Fue una iniciativa acertada, porque en otras áreas la gente no paraba de inmortalizar momentos con sus cámaras.
Bar de mascarillas de barro
Nuestras entradas Comfort incluían una mascarilla de barro de cortesía en el bar de mascarillas, con opciones de barro blanco o negro. Sin embargo, la persona del bar no nos preguntó la preferencia y simplemente nos entregó el barro sin explicar nada. Tampoco vimos instrucciones de uso. Tuvimos que guiarnos por lo que decían otros: aplicar el barro en la cara, dejarlo actuar 10 minutos y luego aclararlo.
La mascarilla de barro ofrece varios beneficios para la piel. Contiene minerales, sílice y algas que nutren y reparan la piel. Ayuda a eliminar impurezas, limpia en profundidad y la deja más clara. También fortalece la función barrera, contrae los poros y mejora la textura.
Era posible comprar mascarillas de barro para usar en casa en la tienda de Blue Lagoon, cerca de la salida.
Bar acuático
Tras pasar por el bar de mascarillas, nos acercamos al bar acuático al otro extremo de la piscina. Al principio pensábamos que la bebida de cortesía sería un vaso pequeño de zumo corriente. Sin embargo, nos sorprendió que también ofrecieran bebidas alcohólicas, como cerveza local. Decidimos pedir cerveza; uno de nosotros optó por una bebida sin alcohol servida en vaso de plástico por seguridad. Alrededor de las piscinas había recipientes para depositar los vasos.
Elegimos una cerveza islandesa llamada Gul, de sabor limpio y refrescante. A pesar de la cola en el bar acuático, solo esperamos unos minutos porque el servicio era muy ágil. Podíamos llevar las bebidas a cualquier parte de la piscina y las disfrutamos en la zona tranquila, la más alejada de la entrada.
Saunas y cascada
Las zonas públicas de Blue Lagoon ofrecen tres tipos de saunas. Una de ellas es la sauna finlandesa, una sauna seca calentada con piedras. Normalmente, en una sauna finlandesa se vierte agua sobre las piedras para generar vapor y aumentar la sensación de calor. En la sauna finlandesa de Blue Lagoon, los visitantes tenían que tirar de una cuerda para que el agua cayera sobre las piedras. La sauna no se calentó tanto como esperábamos, lo que puede venir bien a quien no esté acostumbrado.
Para sentir más calor en la sauna, siéntate en los bancos superiores. A algunos les gusta más caliente que a otros; en cambio, en el banco inferior hará más fresco.
Además, había dos baños de vapor. Uno era el típico de muchos spas. El otro era singular: de madera y con interior más oscuro, lo que creaba un ambiente acogedor diferente al de un baño de vapor habitual. Todas las saunas de Blue Lagoon Iceland son mixtas, por lo que se solicita a los visitantes llevar bañador.
Fuera de las saunas había una pequeña cascada artificial pensada para disfrutar de un masaje de agua bajo su caída. También hay una zona de duchas para enjuagarse al salir de la sauna. Además, junto a la sauna hay una fuente para beber y rehidratarse.
Restaurante Lava
Decidimos no comer en Blue Lagoon y dedicar el tiempo a las piscinas, ya que pensábamos visitar la sala VIP del aeropuerto de Keflavík después. La entrada Comfort no incluía la copa de espumoso gratuita, que sí entraba en la más cara Premium. Solo echamos un vistazo rápido al restaurante: parecía acogedor y con buenas vistas a las piscinas.
Tienda de Blue Lagoon
Blue Lagoon cuenta con una tienda en el vestíbulo donde comprar productos para el cuidado de la piel. Cabe mencionar que Blue Lagoon tiene tiendas adicionales en Reikiavik y en el aeropuerto, y también vende en línea. Aunque nosotros no compramos nada, quienes busquen cosmética de origen orgánico probablemente encontrarán algo a su gusto. La tienda ofrecía una gama de artículos, desde la popular mascarilla de barro de sílice hasta hidratantes, limpiadores y exfoliantes, perfectos para montar un spa en casa. Además, vendían recuerdos islandeses como ropa, joyería y artículos para el hogar.
Seguridad y limpieza en Blue Lagoon
Durante toda la visita nos sentimos seguros: había socorristas patrullando activamente y velando por todos los visitantes. También vimos al personal recogiendo residuos, manteniendo el lugar limpio.
Recordatorios especiales para los visitantes
El spa recomienda quitarse toda la joyería (pulseras, collares, anillos) antes de entrar a la laguna. Así evitarás perder objetos o que se dañen por el agua geotérmica de mar, rica en algas, minerales y sílice. Nosotros llevábamos relojes deportivos resistentes al agua y no les pasó nada: siguen funcionando con normalidad.
Quizá te preguntes si es seguro mojar el pelo en el agua de Blue Lagoon. La respuesta es sí. Sin embargo, como comentamos, el agua de Blue Lagoon tiene un alto contenido de sílice. Aunque la sílice no daña el cabello, puede afectarlo: se vuelve rígido y difícil de manejar. Esto fue lo que le ocurrió a uno de nosotros. Pasó una semana desde la visita y el cabello seguía con un tacto inusual. Hemos aprendido que, para evitarlo, lo mejor es aplicar acondicionador durante la ducha antes de entrar en el agua y dejarlo puesto todo el tiempo. Si tienes el pelo largo, conviene recogerlo y usar gorro de baño.
Después del baño en la laguna, es aconsejable lavar bien el cabello con champú y acondicionador. Blue Lagoon ofrece de forma gratuita gel de ducha, champú y acondicionador. Ten en cuenta que probablemente hará falta repetir el proceso varias veces para lograr el mejor resultado.
Valoración
Blue Lagoon es una atracción de 4 estrellas bien diseñada que ofrece una experiencia de spa natural aprovechando la energía geotérmica y agua de mar rica en minerales. Encontramos el spa impecablemente limpio y gestionado con eficiencia por un personal servicial. Aunque hay muchos spas en el mundo que ofrecen una amplia gama de servicios, Blue Lagoon destaca por su concepto distintivo. A diferencia de otros, es un spa al aire libre que se integra con su entorno natural y presume de aguas calentadas geotérmicamente, ricas en minerales. Esta combinación crea una experiencia única que diferencia a Blue Lagoon de otros spas del mundo.
Hay margen de mejora, como incluir más extras gratuitos para justificar el alto precio de la entrada. Salvo un baño de vapor, las saunas carecían de rasgos singulares, y las instrucciones escritas faltaban o eran difíciles de encontrar. La clientela llega de culturas muy diversas y la sauna puede ser algo nuevo para muchos. Aun así, Blue Lagoon sigue siendo un lugar imprescindible en Islandia; aunque sea turístico, merece figurar entre las 25 maravillas del mundo.
Dónde comprar entradas
Si llegas a Blue Lagoon en coche, te alegrará saber que hay amplio aparcamiento gratuito. Para asegurar disponibilidad y comparar precios, es aconsejable reservar las entradas en línea en la web de Blue Lagoon o en GetYourGuide. Si también necesitas transporte, lo ideal es reservar un tour. Hay opciones desde el aeropuerto, Reikiavik o zonas cercanas. GetYourGuide también ofrece una amplia variedad de excursiones a Blue Lagoon y a otros atractivos de Islandia.
Preguntas frecuentes
- ¿Dónde está Blue Lagoon?
- El spa geotérmico Blue Lagoon está en el suroeste de Islandia. Se llega rápido desde el aeropuerto de Keflavík o desde Reikiavik.
- ¿Cómo llegar a Blue Lagoon?
- Se puede llegar fácilmente con un alquilar un coche. La otra opción es reservar una excursión si no conduces.
- ¿A qué temperatura está el agua en Blue Lagoon?
- La temperatura media del agua es de 38 °C (100 °F). En algunas partes de las piscinas se siente incluso más caliente.
- ¿Qué contiene el agua?
- El agua es rica en algas, sílice y minerales, lo que le confiere propiedades curativas y nutritivas distintivas.
- ¿Por qué el agua de Blue Lagoon es azul?
- Su tono azul lechoso se debe a su alto contenido de sílice.
- ¿Dónde reservar entradas para Blue Lagoon?
- Recomendamos comprar las entradas en una agencia de reservas de confianza, GetYourGuide.
Conclusión
En resumen, nuestra experiencia en Blue Lagoon fue estupenda y la recomendamos de todo corazón. Todo funcionó a la perfección, desde la facilidad de llegada hasta el registro eficiente. La limpieza de las instalaciones fue destacable, garantizando una visita higiénica y agradable. Fue genial disfrutar de una cerveza islandesa en medio de un paisaje agreste mientras nos relajábamos en aguas cálidas. Aunque el precio pueda ser elevado, la experiencia ofrece una buena relación calidad-precio. Es importante tener en cuenta que operar un spa al aire libre de esta magnitud conlleva costes significativos. Dado que Blue Lagoon es muy popular, reservar la entrada con antelación es esencial para garantizar la visita, especialmente en horas punta, y así evitar la decepción de quedarse fuera.
Tras la visita nos sentimos totalmente relajados; la piel estaba más suave y esa frescura nos acompañó en el vuelo de regreso a casa. No nos arrepentimos de haber visitado Blue Lagoon.
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